Fuerza de la ONU en Haití

El Consejo de Seguridad de la ONU votará hoy una resolución que autoriza el despliegue de una fuerza internacional en Haití durante un año. Su objetivo principal es ayudar a frenar la creciente violencia de las pandillas y restaurar la seguridad en el país, permitiendo finalmente la realización de elecciones presidenciales largamente postergadas.


La resolución, redactada por Estados Unidos y respaldada por Kenia para liderar la fuerza de seguridad multinacional, establece que esta fuerza será financiada mediante contribuciones voluntarias y operará de manera independiente a Naciones Unidas.


La misión tendrá un plazo inicial de un año y será reevaluada después de nueve meses. Su principal función será proporcionar apoyo operativo a la Policía Nacional de Haití, que actualmente cuenta con recursos limitados. Con apenas 10,000 agentes activos para una población de más de 11 millones de habitantes, la fuerza internacional ayudará a fortalecer la capacidad de la policía local, colaborando en operaciones conjuntas para combatir a las pandillas y mejorar las condiciones de seguridad en el país.


Además de su labor en el ámbito de la seguridad, la fuerza también se encargará de proteger infraestructuras críticas y puntos de tránsito, incluyendo el aeropuerto y puertos marítimos, que han sido objeto de control por parte de pandillas, obstaculizando el transporte de alimentos y otros suministros esenciales.


La resolución otorgará a la fuerza la autoridad para tomar medidas temporales urgentes con carácter excepcional para evitar la pérdida de vidas y mantener la seguridad pública. También requerirá que los líderes de la misión informen regularmente al Consejo de Seguridad de la ONU sobre sus objetivos, reglas de compromiso y necesidades financieras antes de un despliegue completo.


La aprobación de esta misión representa un esfuerzo conjunto de la comunidad internacional para abordar la creciente violencia, actividades criminales y abusos a los derechos humanos en Haití, incluyendo secuestros, violencia sexual y de género, trata de personas, tráfico de migrantes, homicidios y ejecuciones extrajudiciales.


Si la resolución es aprobada, será la primera vez que se despliega una fuerza internacional en Haití desde la misión de estabilización de Naciones Unidas en 2004, que se vio empañada por escándalos de abusos sexuales y la propagación del cólera y concluyó en 2017.


Sin embargo, existen preocupaciones respecto a la misión liderada por Kenia debido a acusaciones previas de abusos por parte de la policía de dicho país. La resolución enfatiza la necesidad de prevenir la explotación y el abuso sexuales, así como investigar los antecedentes de todo el personal involucrado. También exige medidas de gestión ambiental para prevenir enfermedades transmitidas por el agua, como el cólera.


La extensión de la fuerza, en caso de ser aprobada, aún es desconocida, aunque Kenia propuso enviar 1,000 agentes de policía. Otros países, como Jamaica, las Bahamas y Antigua y Barbuda, también se han comprometido a contribuir con personal. El gobierno de Estados Unidos ha prometido apoyo logístico y 100 millones de dólares para la fuerza encabezada por Kenia.


La resolución advierte que el Consejo de Seguridad impondrá sanciones adicionales a aquellos que contribuyan a la violencia en Haití, en un esfuerzo por restaurar la paz, la estabilidad y la seguridad en el país y la región.

-AP