Una investigadora y doctora en medicina y farmacéutica de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) permitió identificar los principales riesgos que corren quienes se adentran en el mundo del fitness sin la adecuada dieta nutricional requerida para tales fines.


Ysabel Noemí Tejeda Díaz presentó un estudio postdoctoral titulado “Desde el culto al cuerpo: una mirada a las prácticas alimentarias contemporáneas”, disponible como tema de consulta dentro del libro “Currículo y Formación de Investigadores”, cuyo enlace es el siguiente: clic aquí).


En la investigación, en concreto, se precisa que evidencias puntuales extraídas de un grupo de practicantes del fitness, que sirvieron como voluntarios, permitieron identificar la lista de amenazas a las que se ven expuestos quienes entrenan sin el debido acompañamiento profesional.


Los suplementos


De acuerdo al estudio de Tejeda Díaz, se significa que la mayoría de los consultados admitió que incluye en su dieta la ingesta de suplementos, con el interés de mejorar el rendimiento físico y obtener resultados deseados en tiempo récord.


Subraya en su trabajo que la amenaza directa no son los suplementos, sino el uso indiscriminado de estos productos que solo pueden ser consumidos bajo la prescripción de un nutriólogo, especialista que ha sido peligrosamente sustituido en el fitness por la figura del entrenador.


Señala también que por lo regular los suplementos como parte de la alimentación, se recomiendan en los primeros años de vida del ser humano, a partir de los seis meses y posterior a los 65 años de edad, cuando el cuerpo empieza a experimentar deficiencias para sintetizar proteínas. 


Los riesgos


La investigación indica que quienes caen en la obsesión del culto al cuerpo, consumiendo anabólicos sin la debida prescripción, se arriesgan a padecer de insuficiencia renal crónica, por sobrecargas metabólicas de proteínas, complicaciones intestinales, trastornos hepáticos y debilitamiento del sistema inmune.


La profesional de la salud, Tejeda Díaz, ante tan peligroso escenario, llama a evitar las equivocadas prácticas del culto al cuerpo, una tendencia de la postmodernidad con raíces de la cultura griega que seduce a hombres y mujeres en la búsqueda de una “apariencia perfecta”.


Reconoce, sin embargo, que el fitness es saludable con las prácticas alimenticias adecuadas, ayudando a controlar el estrés, fomentando las relaciones sociales y sirviendo como medicina preventiva frente a eventuales enfermedades cardíacas.

-eluniversitariouasd