Las autoridades del estado de Utah han tomado la controvertida decisión de vetar la presencia de la Biblia en varias escuelas de nivel elemental y medio del distrito escolar de Davis. Esta medida se produce después de que un padre de un alumno denunciara el contenido de la Biblia como "pornográfico" y violento.


La denuncia se basó en una polémica normativa estatal aprobada en 2022, que permite retirar libros considerados inapropiados de los centros educativos. Esta legislación ha sido utilizada principalmente por grupos conservadores para censurar libros con temática racial o LGBT.


El padre que presentó la demanda enumeró una serie de temas controvertidos presentes en la Biblia, como incesto, onanismo, bestialidad, prostitución, mutilación genital, felación, violación e incluso infanticidio. Argumentó que estos temas no eran apropiados para los alumnos y que la Biblia era pornográfica según la nueva definición establecida por el Código de Utah Ann. 76-10-1227.


Después de una revisión de la acusación, un comité estatal determinó que la Biblia "no contiene material sensible" de acuerdo con la polémica legislación, pero se limitará su disponibilidad a los grados superiores.


Se informa que el padre que presentó la demanda lo hizo como una respuesta frustrada a la retirada de libros de las escuelas debido a denuncias conservadoras. Desafió a las autoridades a revisar el libro sagrado argumentando que era hora de eliminar de los colegios "uno de los libros con más contenido sexual".


Sin embargo, la decisión del comité ha sido apelada por otro padre que desea que la Biblia esté disponible para los estudiantes de todas las edades, generando aún más controversia en torno a esta medida restrictiva.