Lo que ocurrió en julio en Europa, donde una histórica ola de calor solo en España dejó más de 2,200 fallecidos y en Portugal una cantidad aproximada, ha sido atribuido al calentamiento global.


Se han disparado las alarmas, y para algunos expertos no se trata ya de un cambio brusco en el clima, sino de una “normalidad” que ha estado siendo “construida” por el hombre mismo.


O sea, el mundo se encamina a que este tipo de olas de calor sean cada vez más frecuentes, intensas y duraderas, y que se multipliquen otros males como sequías, incendios forestales, inundaciones… si no hay un recorte drástico de las emisiones y si los gobiernos no repiensan o no reenfocan sus planes para contrarrestar el calentamiento global.


En el caso dominicano, si bien estamos recibiendo algunos “avisos”, la población es indiferente y permanece ajena ante un tipo fenómeno que afecta a toda la humanidad.


Debieran ser más del uso y del habla común entre nosotros términos como emisiones de gases de efecto invernadero, protección de la capa de ozono, consecuencias del cambio climático, calentamiento global, reforestación…


El Gobierno debiera encaminar esfuerzos para concienciar. Tal vez mostrar algo de preocupación en torno a eso, porque las autoridades aparentan estar “al día” en cuanto a la ratificación y permanencia en acuerdos y convenios internacionales, y en el cumplimiento de metas.


Pero mientras tanto nuestros ríos se mueren, nuestros bosques son talados, los manglares se secan y las áreas protegidas son invadidas por cultivos que no dejan al erario un solo peso, porque se trata de actividades clandestinas contra las que poco se actúa.


Lo de la histórica ola de calor en Europa pudiera ser la confirmación de lo que por años se decía: que lo del cambio climático no tenía fecha en el calendario y si seguía aumentando la temperatura crecería el riesgo de que sucedieran desastres realmente inaceptables.


Es tiempo de concertar esfuerzos en todo el mundo; ya hay que dejar de hablar del cambio climático como si fuera un problema del futuro porque ha comenzado a estallar ahora mismo.


- hoydigital